¿Tienes alguna parte del cuerpo menos desarrollada que otra? ¿Tienes buen bíceps pero tu hombro está más plano que una hoja de papel? Aquí veremos brevemente como actuar ante este problema.
La solución: priorizar ese grupo muscular rezagado en el entrenamiento.
Proporción muscular
Se requiere algo más que masa muscular para lograr un físico admirable. Los grupos musculares deben desarrollarse de manera proporcionada.
Todos los culturistas desean unos grandes bíceps, esos enormes brazos para exhibición. Pero si desarrollas los bíceps exageradamente con respecto al pecho y hombros, no estarás consiguiendo un físico equilibrado y tampoco conseguirás una apariencia estética.
La razón de que Frank Zane pudiera ganar el Mr.Olympia contra tipos 20 kilos más pesados que el es que tenía una proporción muscular (casi) perfecta.
En nuestra página de facebook de cambiatufisico tenemos una galería de fotos dedicada a Frank Zane. Juzga por ti mismo y compáralo con los actuales monstruos de vientre hinchado.
Mantente equilibrado
Un físico equilibrado y proporcionado puede ser asombroso, pero también ha de tener un sentido biomecánico.
Los desequilibrios musculares son un camino rápido hacia las lesiones, como por ejemplo el olvido de los músculos del manguito de los rotadores, originará pronto un par de hombros doloridos.
En vez de centrarte en una sesión intensa para el brazo, entrena todas las partes de tu cuerpo con la misma atención. Es muy común ver a gente haciendo bíceps tres o cuatro veces a la semana, haciendo hombro una vez con tres ejercicios desganados y pierna… la pierna… muchos hacen cuatro series de extensiones una vez al mes.
Cuestión genética
A pesar de tu perseverancia por entrenar cada grupo muscular con igual intensidad, descubrirás que ciertas partes del cuerpo responden al ejercicio mejor que otras.
Incluso algunos culturistas profesionales sufren la falta de desarrollo en algunas zonas de su cuerpo. Puede ser por un olvido inconsciente, pero generalmente es por un problema genético, algunos están dotados de grandes brazos y otros nacen con unas pantorrillas regias.
Lo mejor es ser objetivo y detectar la falta de desarrollo de un grupo muscular para darle prioridad en el entrenamiento.
Hay tres formas de priorizar el área débil:
1. Entrena la parte del cuerpo menos desarrollada al principio de la sesión de trabajo, cuando los niveles de energía son más altos.
Un claro ejemplo de esto es cuando se realiza bíceps-tríceps en la misma sesión de entrenamiento. Te recomiendo empezar por el músculo que quieras priorizar. Si te fallan los tríceps comienza por el tríceps, y viceversa.
2. Recoloca el grupo muscular débil al principio de la semana cuando el cuerpo está fresco después del periodo de descanso del fin de semana.
Por ejemplo si te falla mucho la pierna o te cuesta hacerla, puedes hacerla el lunes. Además evitarás a la legión de personajes ávidos de entrenar su pecho y bíceps después del fin de semana.
3. Trabaja esos músculos infradesarrollados más que el resto.
Prueba a trabajar ese músculo retrasado dos veces por semana o incluye unas series extras cada día para ese grupo muscular en concreto. Por ejemplo puedes trabajar pecho y hombro el lunes y el jueves realizar otro entrenamiento de hombro o añadir unas series de dominadas cada día para intentar mejorar la amplitud de tu espalda.
Te recomendamos intentar estas prácticas si no puedes desarrollarte proporcionadamente… puede que tu veas un bíceps impresionante, pero la gente siempre se fijará en tus defectos, por no hablar de los jueces en una competición. Un gemelo invisible puede dar al traste con toda tu preparación.