Aunque pueda parecer lo contrario, la música en el gimnasio es un elemento importante del entreno culturista.
Es difícil encontrar un gimnasio donde no suene permanentemente un tipo de ritmo u otro; sorprende, sin embargo, la falta de sensibilidad que demuestran ante este factor los responsables de las salas deportivas: lo único que en general parece importarles es que el recinto esté inmerso en cualquier clase de ruido.
Caso aun más deprimente es cuando los gimnasios incorporan televisiones para tener entretenidas a mentes que saldrían huyendo si descubrieran de pronto que están entrenando, o cuando las convulsivas salas de aeróbic carecen de la adecuada insonorización.
La música adecuada en el gimnasio
Según una extendida opinión, cuanto más trepidante es la música del gimnasio más estimulante resulta para el entreno. Éste es, sin embargo, un principio falso.
A la hora de seleccionar el tipo de música para el entreno en el gimnasio es muy importante no confundir estos dos términos: excitación y estimulación.
El primero constituye una movilización turbulenta y desordenada de las energías superficiales del individuo; el segundo, por el contrario, implica el desbloqueo de energías más profundas y su activación controlada.
La música en el gimnasio tiene este poder movilizador gracias a su naturaleza rítmica y emotiva, y supone una grave limitación no aprovecharlo sabiamente.
Los criterios que deberían regir la elección del factor musical en el entreno culturista son fundamentalmente tres: habría que recurrir a tipos de música estimulantes, pero no excitantes; que favorezcan la concentración e interiorización; que creen en el recinto un ambiente distendido y relajado, pero no inerte.
Son principios, desde luego, muy generales, pero ofrecen cuando menos una línea ordenada y coherente de acción a la hora de elegir la música de un gimnasio.
Llevar tu propia música al gimnasio
¿Se han convertido tus entrenamientos en muy normales? Cambia tu música para motivarte, entrenar mejor y ser más fuerte.
Vamos a investigar si escuchar música mientras entrenamos ejerce un efecto sobre el ejercicio y la fuerza muscular.
Seguro que te suena esto: «Acabo de comprar un mp3 para usarlo en el gimnasio. Juraría que desde que escucho mis canciones favoritas, han mejorado mucho mis entrenamientos.»
¿Puede afectar la música el ejercicio?
La música potencia tu entrenamiento
Este experimento lo puedes comprobar tu mismo en cualquier momento.
Para investigar los efectos de la música sobre la fuerza muscular, seleccionamos a un grupo de culturistas entrenados para que hicieran hombro dos veces distintas.
Las dos rutinas consistían de tres series de press con mancuernas, tres series de remos en multipower y tres series de elevaciones laterales, todas hechas de acuerdo a las 10 repeticiones máximas, llevando cada serie hasta el fallo muscular.
Durante un entrenamiento, los sujetos hicieron la rutina escuchando la música preferida; durante el otro, no escucharon música
En cada serie de cada ejercicio de hombro, los sujetos hicieron como promedio, cuando escuchaban música, al menos una repetición extra, y en algunos casos, dos más que cuando no la escuchaban.
Parece razonable al considerar la motivación que implica escuchar música.
Pensad en el efecto de la música sobre las escenas dramáticas de las películas y sentiréis que es verdad lo que decimos.
Varios estudios más formales han demostrado que los corredores pueden aumentar la velocidad de la carrera y reducir la fatiga.
Por lo tanto, podemos esperar efectos similares como el descenso de la fatiga y el incremento de la fuerza muscular cuando escuchamos música y levantamos peso.
Nuestro consejo
Antes de empezar tu próximo entrenamiento, crea una lista de canciones favoritas que te mantengan motivado.
Obtendrás más fuerza y menos fatiga, debido sobre todo a la motivación proporcionada por la música
Otra razón puede deberse a que al tener los cascos puestos, se eliminan distracciones como es hablar con otros miembros del gimnasio y aumentas considerablemente la concentración.
Si eres de los pocos que aún entrena sin música te recomendamos hacer la prueba, notarás la diferencia y sacarás unas repeticiones extra.
Si ya lo hacías… puedes comentar que música realmente te motiva.